viernes, 11 de diciembre de 2009

Manifiesta tu admiración por sus encantos, Arte de amar, Ovidio.

Manifiesta tu admiración por sus encantos.
La costumbre favorece el amor y las ausencias momentáneas son también un incentivo amoroso, pero no te ausentes demasiado tiempo.

Que no se entere de vuestra aventura con otra, pero a veces resulta beneficioso que ella se entere de tu infidelidad.

La unión amoroso reconcilia. Ofrécele ese poderoso medicamento cuando esté enojada.

Cuando ella quiera te acercarás, cuando te rehuya te alejarás.

En el amor, no hay que apresurar el placer de Venus, sino retrasarlo poco a poco con morosa lentitud. No dejes atrás a tu amada ni te adelantes en la travesía, llegad a la meta al mismo tiempo. Es la norma a la que debes ajustarte cuando tienes tiempo de sobra y el temor no apresura la acción furtiva. Pero cuando el demorarse tiene riesgos conviene lanzarse a todo remo.

Sólo aquel que se conozca a sí mismo amará con talento.

Ovidio, Arte de amar, http://psicologia.laguia2000.com/general/el-arte-de-amar. Seleccionado por Fabiola Muñoz Hinojal, segundo de Bachillerato, curso 2009-2010.

Canción de Roldán "Comienza el desastre", Anónimo.

Cuando observa Roldán que Sansón está muerto,
podéis imaginar qué gran dolor sintió.
Espolea el caballo, galopa cuanto puede
blandiendo a Durandarte, que vale más que el oro.
Va a acometerlo el noble con la fuerza que puede
galopeándose el yelmo, todo el oro labrado.
Le corta la cabeza y la cota y el cuerpo,
le ha partido la silla, toda de oro labrada,
y le llega al caballo, rompiendo su espinazo.
A los dos ha matado, lo alaben o lo maldigan.
Los paganos responden:"¡El golpe nos es duro!"
Y responde Roldán:"No quiero a los paganos,
pues están con vosotros el error y el orgullo."

Anónimo, Cantar de Roldán, Cátedra, Colección Letras Universales, 1999. Seleccionado por Beatriz Curiel Lumbreras, segundo de Bachillerato,curso 2009-2010.

Arte de amar , "Las técnicas cambiarán según el carácter de cada una", Ovidio.

Ya iba terminar, pero las mujeres tienen distintos caracteres; conquista de mil maneras esos mil corazones. Tampoco una misma tierra produce de todo: una es apropiada para plantar vides, otra para olivos; en esta otra verdean con pujanza las mieces, como formas en el universo: el que es listo, se adecuará a esos innúmeros caracteres y, del mismo modo que Proteo, una veces se derretirá convirtiéndose en líquida agua, otra veces en león, otras en árbol y otras será un hirsurto jabalí. Aquí pescan con arpón, allí con anzuelos, en otra parte las redes, abombadas por medio de una cuerda tirante, arrastran a los peces. Tampoco a ti te convendrá la misma táctica para todas las edades; una cierva vieja se dará cuenta de las asechanzas a mayor distancia. Si ante la inculta te presentas como docto, y ante la vergonzosa como desenvuelto, enseguida ella desconfiará de sí misma, sintiéndose desgraciada. Por eso ocurre que la que tuvo miedo de entregarse a un hombre honrrado, cae en los viles brazos de otro inferior.
Me queda aún parte del tema que me he propuesto, pero parte está ya concluida. Que el ancla arrojada al agua detenga aquí nuestra nave.


Ovidio, Arte de amar, editorial Gredos, año 2001, Madrid, pág 181. Seleccionado por Susana Sánchez, segundo de Bachillerato, curso 2009-2010.